Ella

Y parecía que todo había acabado. Lo parecía.

Parecía que la felicidad llamaba a la puerta. Pero no era felicidad lo que esperaba detrás, sino algo sin forma llamado Ella.

Porque a pesar de todo Ella vuelve a aparecer, y lo mas triste es que esa aparición no sorprende. Porque Ella siempre ha estado ahí, se ha acostumbrado a su persona y su persona se ha acostumbrado a ella, porque encuentran la comodidad el uno en la otra.

Porque aunque se lo han dicho muchas veces y se ha pensado entendido, nada mas lejos de la realidad. La realidad es otra muy diferente. La realidad quema en el pecho y obstruye la garganta. La realidad es que ella sigue ahí.

Y no es que alguna vez se haya ido. En momentos oscuros se esconde en algún rincón para que se la pase por alto.

Le encanta volver a ver ilusión. Eso significa que no la han descubierto, que dentro de poco podrá volver a aparecer.

Es sorprendente ver el rostro de alguien que está acostumbrado a usarla. Ha conseguido formar un todo con el cuerpo, con la persona. Ha conseguido que ni siquiera el cuerpo sea capaz de encontrarla en si mismo.

Pero, de nuevo, su reaparición no sorprende. Y cada vez sorprenderá menos.

Porque todo tiene un límite y Ella siempre acaba cruzandolo. Porque Ella es así.

Pero lo que no sabe es que ha sido descubierta una vez mas. Y siempre acabará siéndolo.

lunes, 8 de noviembre de 2010

 
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